La religiosidad popular, que se expresa de formas diversas y diferenciadas, tiene como fuente, cuando es genuina, la fe y debe ser, por lo tanto, apreciada y favorecida. En sus manifestaciones más auténticas, no se contrapone a la centralidad de la Sagrada Liturgia, sino que, favoreciendo la fe del pueblo, que la considera como propia y natural expresión religiosa, predispone a la celebración de los Sagrados misterios. (DIRECTORIO SOBRE LA PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA)
La piedad popular, considerada justamente como un «verdadero tesoro del pueblo de Dios», «manifiesta una sed de Dios que sólo los sencillos y los pobres pueden conocer; vuelve capaces de generosidad y de sacrificio hasta el heroísmo, cuando se trata de manifestar la fe; comporta un sentimiento vivo de los atributos profundos de Dios: la paternidad, la providencia, la presencia amorosa y constante; genera actitudes interiores, raramente observadas en otros lugares, en el mismo grado: paciencia, sentido de la cruz en la vida cotidiana, desprendimiento, apretura a los demás, devoción».
En nuestra parroquia tenemos un calendario rico que acoge la religiosidad de muchas cultural que viven en nuestro barrio: día de la Madre, Sagrado Corazón, Cruz de Mayo, Misas de Aguinaldo, etc.
Acércate y vive la fe como en casa.